Pero es que yo me siento entre las 4. Tengo miedo a la vejez. Pero a la vez quisiera saber si llegaré a vieja y la única manera de descubrirlo es llegando, por ello ansío llegar. Pero creo que, pensándolo bien, no me interesa mucho eso de lograr tener muchos años, siempre y cuando goce el camino. Y el gozo no me exenta del sufrimiento, que quede claro. Pero a veces me da igual, simplemente lo olvido. Me sumerjo tanto en la vida que a veces me olvido que la estoy viviendo.
Unos argumentan que debería existir un manual para aprender a vivir. Yo digo que entonces no sería vivir. Si no simplemente aplicar algo pre establecido, sería algo así como existir para cumplir el manual.
Beber, escribir y follar, esa es la vida. Decía Bukowski. No sé. Pero lo que si sé es que me repatea la idea esa de que solamente en tu cumpleaños la gente se acuerda de ti. Yo preferiría que no se acordaran nunca porque odio los afectos hipócritas. Se que eso también lo dice la mayoría de la gente. A veces me repatea pensar que soy como el resto de la gente que tanto critico. Creo que después de todo la soberbia ha estado haciendo un trabajo excelente conmigo. Y digo excelente no porque me parezca bien, pero lo que hace lo hace bien.
Es curioso, a mi antes me fascinaba cumplir años, la sensación de crecer de que en cierta medida -y no se aplica en todos los casos- viene un año nuevo con procesos de madurez y cambios, sin embargo, mis últimos dos cumpleaños han sido tristes, desesperados, siento que se me acaba el tiempo... pero ¿para qué? no se... Claro, pudiera morir mañana o en este instante, tal ves cumplir años me patentiza la muerte... no estoy segura...
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