jueves, 26 de enero de 2012

termina lo que empiezas...

Hola, hoy te usaré de diario, al fin y al cabo solamente somos tú y yo.
¿Sabes? ... este día fue -bueno, sigue siendo- muy extraño. No EXTRAORDINARIAMENTE raro, pero un poco versátil.
Demasiado versátil diría yo. ¿Que divago mucho? sí perdona es que me siento un poco loca ahora, fue una hora un poco acelerada, disculpa, se que me aprovecho.

Todo empezó muy bien, la madrugad fue amable conmigo, no me jodió como lo pensé. Eso de dormirse a la 1 de la mañana y despertar a las 6, bueno sabes que no deja muchos ánimos para el día.
Pero te digo, desperté de buen humor y mi ida al centro de idiomas fue tan amena que al llegar a casa estaba muy animada para disponerme a leer mis temas para la clase del día de hoy.

Y sí, todo bien igual, leí, entendí (o al menos eso creí) todo perfecto pero empecé a sentirme extraña con la gente con la que me relacionaba...

Fue algo así como vivir un desierto, luego una fiesta, luego una pradera luego una selva.

Las clases estuvieron fatal, me sentía fuera de lugar, ignorada.

Sabes qué? ya lo olvidé todo, hablamos luego sale? vale vale..
chao

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