Busqué y busqué, a veces me sorprendía mi capacidad para convertirme en un agente demasiado personalizado del FBI. No sabía siquiera que buscaba. ¿Amor? ¿Amistad? ¿Simple curiosidad?
No conocía su nombre.
Bueno una vez, lo escuché. Distorsionado pero lo escuché. Lo había mencionado alguien a quien jamás hubiera notado si no hubiera mencionado su nombre. Como el sordo no oye pero compone, hice una lista de los nombres que tenían la posibilidad de ser. Haciendo anagramas como si pudieran traer al recuerdo esa palabra.
Palabra... denominarlo así creo es demasiado vacío. Para mi no sólo era una palabra o un nombre ni siquiera era alguien. Bueno, en realidad, no tenía idea de qué significaba para mi.
Todo empezó en un café. Sí, como la canción lo menciona, pero no tiene, fuera de la coincidencia con el título, alguna otra razón de mención.
Estaba yo bebiendo un moka, con mi amiga. Cuando yo levante mi cabeza después de no haber encontrado las respuestas que seguramente buscaba en el café, cruzamos miradas. Me sonríó. Sé que puede resultar estúpido, ñoño y absurdo para algunos, lo que logró causar en mi esa sonrisa. Esa mirada para mi fue la conexión. A veces cuando lo reconsidero me parece tan insulso...digo a diario cruzamos miradas con cientos de personas, quizá una que otra sonrisa ... pero estoy segura que ninguna como esa.
¿Casualidad? ¿Causalidad?... al tiempo volví a verlo por mi facultad. No podía creerlo. Me sentía una adolescente de secundaria. Bueno quizá aún lo sea, nunca me he creído mucho eso de la maduración.
Seguí viéndolo, yo sólo quería saber su nombre, saber qué era lo que me ilusionaba y por qué. A quién era a quien pensaba o por lo menos ponerle nombre esos pensamientos.
Yo soy tímida, demasiado diría yo. Insegura, bastante. Era incapaz de acercarme y decirle siquiera un "hola". Eso aumentaba mi frustración y mi inseguridad. Me sentía tonta e incapaz siquiera de hablar con alguien a quien secretamente (y me produce un tanto de vergüenza decirlo ahora) había seguido cuando podía encontrarlo.
Con el tiempo mis deseos fueron disminuyendo. Sabía que él gustaba de mi amiga. O quién sabe. Debido a mi inseguridad hago conjeturas y suposiciones todo el tiempo.
Un día sin buscarlo, llegó. Su nombre, su edad, su profesión, un poco su manera de ser, sus gustos, él.
Al principio mencioné que había buscado y buscado sin cesar (y claro sin que alguien sospechara) algo que me diera siquiera alguna pista. Y lo hice, con lo que había a mi alcance. Pero cuando dejé de buscar... ahí estaba. Como por arte de magia. En un momento importante de mi vida. Pero me intriga saber que pasará después.
Atte. Nadie
No hay comentarios:
Publicar un comentario